HIGHLINE EN LAS ROCAS DE SUESCA

Highline y “los locos de la cuerda floja»

El highline es una nueva tendencia en los deportes de alto riesgo que combina la concentración y el equilibrio con el vértigo y el vacío de las alturas.Se dice que el slackline nació a principios de los años 8o’s como un pasatiempo y luego como entrenamiento de los escaladores del valle de Yosemite en los Estados Unidos, cuando éstos caminaban al principio sobre cables y cadenas flojas y posteriormente sobre su propio equipo de escalada. Poco a poco el uso de la cinta se fue difundiendo por todo el mundo hasta convertirse en una práctica independiente de la escalada.

Se podría decir que fueron los grandes malabaristas y cirqueros quienes dieron origen a esta actividad, llevándola a cabo incluso sin protección para caídas, pero existen algunas diferencias en los materiales y condiciones del montaje que diferencia el slackline del funambulismo, ya que éste se practica sobre un cable de acero totalmente tenso, mientras que aquel se realiza sobre una cinta ligeramente elástica, lo que permite efectuar saltos, movimientos y trucos más dinámicos y espectaculares.

Existen varias modalidades dentro del slackline. La más popular es el trickline, donde la cinta se tensa a poca distancia del suelo para caminar o entrenar posturas y trucos de destreza. Otra modalidad corresponde a longline, que son cintas de más de 30 metros de largo y se utilizan principalmente para caminar. Y la modalidad más extrema es el highline, que consiste en caminar sobre una cinta tensa a más de 20 metros de altura.

En cercanías a la zona del Gran Techo, frente al tercio superior de la vía La Clavícula existe una pequeñísima plataforma de salida sobre roca ligeramente desplomada. Se abre entonces un portal de entrada a la dimensión de las alturas; donde la motivación supera el instinto de supervivencia y las gentes se lanzan al vació sin caer, trémulos de pavor se desplazan sobre una fina hilada, casi [evitando, como si fuese un truco de magia, desafiantes ante el abismo.

Después de inspecciones minuciosas y un intento fallido del montaje, finalmente se logró instalar una cinta de 20 metros de longitud sobre un vacío de aproximadamente 50 metros de altura.

Entonces los que ayer escalaban los techos y desplomes de las Rocas de Suesca, hoy se desplazan sobre cintas de reducido apoyo, combinando las modalidades deportivas que les permitan innovar en la pasión de sus vidas: la Montaña, la Roca, las Alturas. Convirtiéndose en los seres que suben por las paredes y caminan sobre el aire, para la gente de pies en el suelo: “los locos de la cuerda floja’’.

DATOS DE INTERÉS.

Slackline más alta: Víctor Hilo, en Kjerag Noruega. La slackltne tenía una altura de 1.000 m.

Slackline más larga: Lukas Irmler cruzó una cinta de 310 m.

Highline más larga: Andy Lewis cruzó 103,5 m de largo, en el desierto de Mojave en Utah.

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